• 07/05/2024

Un número creciente de ejecutivos en Gran Bretaña está descubriendo que sus paquetes salariales dependen de qué tan bien se desempeñen en métricas ambientales, sociales y de gobernanza.

Un número creciente de ejecutivos en Gran Bretaña está descubriendo que sus paquetes salariales dependen de qué tan bien se desempeñen en métricas ambientales, sociales y de gobernanza.

El desarrollo se produce cuando los accionistas hacen valer su poder, con la ansiedad en torno al cambio climático que impulsa el activismo de los inversores y obliga a las empresas a adaptarse. También hay evidencia de que las empresas del FTSE 100 ahora son mejores en la producción de estrategias ESG que son medibles, lo que facilita que las partes interesadas responsabilicen a los ejecutivos.

Para hacer espacio en la “tarjeta de puntuación” de los ejecutivos, los criterios convencionales para medir el rendimiento, como las ganancias por acción, que se centran en los rendimientos de los accionistas, están desempeñando un papel menor. Tales medidores se usaron en un 5% menos de planes de bonificación, encontró el estudio.