Uber Reduce accidentes borrachos
Conocemos bien los problemas de Uber. Sus múltiples dificultades para ajustarse a la legalidad, su golpe crítico a uno de los sectores laborales más importantes de las economías locales, la feroz competitividad que propone y que precariza las condiciones de los empleados. Sabemos, incluso, de los escándalos personales de los líderes de la compañía. Pero una década después de su llegada al mercado también es justo hablar de las influencias positivas de esta plataforma de transporte individual.
Uber salva vidas. O como mínimo, evita accidentes. Es la teoría de un estudio realizado por la Universidad de Nueva York, ciudad en la que este servicio está implantadísimo. Según sus estadísticas, y comparando la evolución de los siniestros de las grandes ciudades de distintos estados norteamericanos en el mismo periodo, la llegada de Uber ha ido de la mano de una bajada de entre el 25 y el 35% de los accidentes de coche relacionados con la conducción bajo los efectos del alcohol.
43 accidentes menos al mes. Con una media mayor a medida que la aplicación está más implementada entre la población, lo cual tiene sentido. También hizo pruebas de dónde se provocaban menos accidentes y es en aquellos sitios con mayor acceso a Uber, barrios como Queens o Manhattan veían bajar proporcionalmente sus accidentes en mayor medida que el Bronx.