• 28/04/2024

Demanda de inversores y baterías ha aumentado en el último mes en la República Dominicana

Debido a los apagones registrados en las últimas semanas, ciudadanos del Gran Santo Domingo gestionan comprar inversores para poder dormir tranquilos ante las altas temperaturas en la República Dominicana.

“Es difícil conciliar el sueño si no hay electricidad para poder, por lo menos, encender un abanico. Al otro día uno se levanta con el mismo cansancio y lo fuerte es que hay que irse a trabajar”, indica Martín Ortiz, plomero de profesión.

Ortiz, al igual que otros ciudadanos consultados por Diario Libre, tiene pensado instalar otra vez un inversor para poder dormir tranquilo, pero hay algo que le impide materializarlo: el costo de las baterías.

Varias de las interrupciones eléctricas que se han registrado en el país han sido por averías, mantenimiento, robos y trabajos técnicos en algunas subestaciones, entre otras causas.

“El calor es la causa principal de las averías e interrupciones eléctricas que ocurren en los últimos días; ese calor provoca que las facturas eléctricas de los clientes suban porque electrodomésticos trabajan más. La solución es usar eficientemente la energía para cuidar los bolsillos”, expresó recientemente el administrador general de Edesur Dominicana, Milton Morrison.

A mediado de junio 2023, el Gobierno dominicano autorizó una inyección adicional de recursos a la Empresa Distribuidora de Electricidad del Este (Edeeste) para aumentar en un 300 % su capacidad de atender los problemas que enfrenta el suministro de energía en su área de concesión. Esto se dio en un momento en que se producían apagones en distintos puntos del país.

Los apagones en ese momento, de acuerdo a las autoridades, eran por la deficiencia en las líneas de distribución, robo del servicio y, adicionalmente, demanda de potencia eléctrica para ejecución de obras del Estado para avanzar.

El panorama
En un recorrido realizado por Diario Libre en diferentes establecimientos comerciales, los precios de las baterías oscilan entre 7,595 pesos hasta 10,860 pesos, dependiendo de la marca y la empresa que los venda. Si las baterías son de las llamadas “gelatinas” cuestan por encima de 16,000 pesos.

Por igual, los inversores cuestan, los de 2.5 kilos, 18,695 pesos, y hay otros desde 3.0 kilos que superan los 22,995 pesos.

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